Juventud y Desarrollo Humano

El INDH significa un aporte importante para la compresión de la compleja realidad de las y los jóvenes de nuestro país.

En términos del deber ser, la etapa de la juventud debiera ser una etapa en la cual se han empezado a superar las tensiones que genera la adolescencia y se desarrolla un plan de vida que empieza a ser perseguido con ahínco;  debiera ser un estadio en el que las y los jóvenes han completado la educación media y tienen ya una ocupación o están en el esfuerzo de formarse para una carrera. Debiera ser momento en donde la perspectiva de integrarse al mercado de trabajo y empezar a desarrollar autonomía emocional y económica respecto de los padres genera en las y los jóvenes una actitud positiva ante el entorno social en el que se desenvuelven.

La situación de las diversas juventudes guatemaltecas es heterogénea y por tanto sus problemas y circunstancias también lo son. Sin embargo, en términos generales la  mayoría de la juventud guatemalteca se enfrenta a una situación de pobreza y pobreza extrema y por tanto a una serie de dificultades para desarrollarse exitosamente y ejercer su ciudadanía a plenitud.

Las principales problemáticas de los jóvenes se refieren a los temas de la educación, la violencia, el desempleo y la inclusión. Dadas las características de la sociedad guatemalteca es evidente que las y los jóvenes se desarrollan un entorno sumamente hostil para su inclusión social, económica y política. 

El desarrollo de las y los jóvenes es producto de recorrer y completar el camino que los hace autónomos a través de la salud y la educación, lo cual les permite una incorporación al mercado laboral, donde deberían obtener ingresos suficientes para ser independientes, mientras crean lazos de colaboración y participan en las decisiones de la comunidad, la sociedad y el Estado. ¿Cuáles son los niveles de desarrollo que alcanzan las y los jóvenes en el país? ¿Es Guatemala un país de oportunidades de desarrollo para la juventud?

Las respuestas a estas y muchas otras preguntas seguramente podremos encontrarlas en el INDH 2011/12. Hoy por hoy, resulta imprescindible abordar el tema de juventud y analizar la problemática de la juventud guatemalteca, pero sobre todo resulta urgente reflexionar sobre los desafíos que la sociedad y el Estado deben asumir, pensando en el desarrollo integral y el pleno reconocimiento de la importancia y la fuerza de la juventud en el corto, mediano y largo plazo.