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Para no perder la cordura

Esta ética puede permitirnos encontrar un camino de lucha para soltar las cadenas de una democracia que algunos han querido volver yugo y no lo que es realmente.
Tipo de Nota: 
Opinión

Para no perder la cordura

16 de Enero de 2012
Palabras clave

Ante lo inevitable de un presidente que a muchos nos recordará lo contradictorio de una sociedad que no se reconoce en su historia, trato de plantearme cómo poder vivir cuatro años sin volverme histérica.

Difícil que alguien salga victorioso, es decir, firme en lo que cree, después de haber escuchado un discurso presidencial en el que se apela a la palabra de un hombre-militar o a los juramentos frente a Dios. Se debe pelear con uno mismo para no creer, para no darle el beneficio de la duda que le hemos dado a todos los anteriores. Por lo que he escuchado, hay esperanza en el ambiente, tal vez a raíz de una curiosidad casi infantil como la que se tiene en las piñatas cuando está por salir el i...

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