Ir
El presidente de Guatemala, Alejandro Giammattei, y la presidenta de Taiwán, Tsai Ing-Wen, saludan desde el balcón del Palacio Nacional de la Cultura, durante las celebraciones por la visita oficial de la primera ministra taiwanesa. Esteban Biba/EFE

A Taiwán le cuesta 450,000 dólares intentar mejorar la imagen de Guatemala en EE. UU.

Tipo de Nota: 
Información

A Taiwán le cuesta 450,000 dólares intentar mejorar la imagen de Guatemala en EE. UU.

Palabras clave
Historia completa Temas clave

La presidenta de Taiwán llega a Guatemala en un momento político débil para ese gobierno, luego de que Honduras cortó relaciones diplomáticas y las inició con China. En Guatemala, el gobierno de Alejandro Giammattei tiene un contrato a su favor por casi medio millón de dólares que Taiwán paga para mejorar su imagen en Washington, aunque al contrastar las actividades del cabildeo no se detecta algún beneficio.

El 13 enero de 2022 la embajada de Guatemala en Washington, a través del embajador Alfonso Quiñónez firmó un contrato de cabildeo con la firma Ballard Partners para hacer influencia entre políticos de Estados Unidos en favor de Giammattei. Lo inusual de la contratación fue el anuncio de que el contrato sería pagado por el gobierno de Taiwán.

Desde la firma del contrato, Taiwán ha pagado 450,000 dólares (3.5 millones de quetzales) en un intento por mejorar la imagen de Guatemala y su cooperación bilateral con Estados Unidos, esto de acuerdo a reportes públicos que Ballard Partners hace al Registro de Agentes Extranjeros de ese país, Fara, por sus siglas en inglés. Sin embargo, no hay indicios de que el lobby contribuyó a mejorar la imagen de Giammattei en el exterior.

El pago del lobby levantó críticas en China, donde un exasesor del gobierno señaló a Taiwán «de comprar la amistad de Guatemala» pese a su mala relación con Estados Unidos, que ha llamado al gobierno a tomar medidas serias para detener el retroceso democrático en el país.

En tanto, Guatemala le promete fidelidad a Taiwán. En una gira oficial realizada en septiembre de 2022, el canciller Mario Búcaro dijo que «no importando cual fuera la situación, Guatemala estará del lado de Taiwán».

Búcaro incluso le dijo al Central News Agency, controlado por el gobierno taiwanés, que «Guatemala espera usar a Taiwán como base para expandir sus exportaciones al sudeste asiático» y que «Taiwán puede usar a Guatemala como base logística en América Latina».

[relacionadapzp1]

El 25 de marzo de 2023, la Secretaría de Relaciones Exteriores de Honduras, anunció que rompió sus relaciones diplomáticas con Taiwán, y que «la República Popular de China es el único gobierno legítimo que representa a toda China».  

Con ese contexto, Tsai Ing-wen, la presidenta de Taiwán, inició en Guatemala una gira que también la llevó a Belice, los únicos dos países aliados que le quedan en Centroamérica.

En Guatemala su agenda incluyó una reunión con Mario Búcaro, ministro de Relaciones Exteriores; un mensaje junto al presidente Giammattei; una visita al parque nacional Tikal y a un hospital en Chimaltenango. Dentro de su gira, Tsai Ing-wen también pasará por Estados Unidos.

Una llamada de 1,000 dólares

Mientras Taiwán hace cálculos políticos para mantener a sus aliados, con sus fondos, en Washington un grupo de lobistas de la firma Ballard Partners opera en nombre del presidente Giammattei y su gobierno. De acuerdo con los registros públicos, los encargados del cabildeo son Brian Allard, presidente de la firma, Michael Adam Goodman, José Díaz, Justin Sayfie, John O’Halon y Silvester Lukis, quienes están domiciliados en Miami y Tampa, Florida.

En un reporte de Ballard Partners a Fara, la firma registra que trabajó «por el mejoramiento de la cooperación bilateral entre EE. UU. y Guatemala». Para ello reportan reuniones en persona con los senadores republicanos Marco Rubio y Tim Kaine, y con los congresistas estadounidenses Byron Donals, Brian Mast, Mario Díaz Balart, María Elvira Salazar y Carlos Giménez.

Uno de esos contactos tuvo efecto. El 14 de junio de 2022, el gobierno de Guatemala anunció que Giammattei tuvo una llamada telefónica con el senador Rubio, quien es miembro del Comité de Relaciones Exteriores del Senado. La conversación habría sido para tratar temas relacionados a la migración y seguridad estatal. Días después de la llamada, el 26 de julio, los lobistas se reunieron en persona con Rubio.

Y aunque el gobierno publicita el contacto como una relación de amistad entre ambos funcionarios, en los reportes de Fara se evidencia que Ballard Parners hizo pagos a la campaña política de Rubio.

El 26 de julio, el día de la reunión en persona, Justin Sayfie hizo un aporte de 1,000 dólares para la reelección de Rubio en el Senado, la cual logró en noviembre pasado. Los documentos oficiales demuestran que el pago se hizo con tarjeta de crédito.

De la misma forma, los lobistas hicieron aportes a las campañas de Mario Diaz Balart, Dave McCormick, y George P. Bush, del Partido Republicano.

Además, en el reporte de Ballard Partners se detallan solicitudes de reuniones vía correo electrónico, llamadas telefónicas y videoconferencias. Los temas que se tratan van desde «guianza en tráfico humano», las políticas migratorias de Guatemala, inversión e invitaciones a funcionarios de ese país a cenas con delegaciones guatemaltecas.

Los lobistas también reportaron que en enero de 2022 se pusieron en contacto, vía mensajes de texto, llamadas y correos electrónicos, con reporteros de The New York Times (NYT) y Político. Esto no implica que los medios de comunicación hayan respondido, ni que publicaran artículos a favor del gobierno; tampoco hay indicios de que el lobby contribuyó a mejorar la imagen de Giammattei en el exterior.

En agosto de 2022, el NYT publicó un reportaje donde señaló que pese a que al asumir el gobierno, Joe Biden y Kamala Harris anunciaron que enviarían millones de dólares a Centroamérica para reducir la corrupción y la impunidad, en Guatemala, Giammattei desmanteló metódicamente los vestigios de instituciones independientes y persiguió a las mismas personas a las que Estados Unidos apuntaba su ayuda: jueces, fiscales, periodistas y activistas.

Los lobistas también han hecho cabildeo con el senador Bob Menéndez, pero específicamente en favor del Congo y Liberia, con quienes también firmaron contratos con los gobiernos. Con Menéndez, Ballard Parners hizo aportes a su campaña electoral por 2,000 dólares, mientras que el senador ha criticado abiertamente al gobierno de Giammattei por «deterioros a la democracia».

En marzo de 2023, Menéndez y otros senadores del Subcomité del Hemisferio Occidental, urgieron al Departamento de Estado a llamar a los funcionarios de Guatemala a rendir cuentas por corrupción, a denegar visas y congelar ayuda económica contra los ciudadanos que violen los derechos humanos y deterioren las instituciones.

«El continuo deterioro de la democracia y el estado de Derecho en Guatemala es profundamente preocupante. Los esfuerzos del presidente Giammattei y su gobierno para hostigar y perseguir a funcionarios gubernamentales, miembros de la prensa y organizaciones de la sociedad civil representan un patrón alarmante de ataques contra personas que buscan erradicar la corrupción desenfrenada de Guatemala», dijeron los senadores en un comunicado.

Mientras esto ocurre se incrementan las alarmas internacionales por la persecución del gobierno contra funcionarios judiciales independientes que investigaron corrupción de alto nivel.

El jueves 30 de marzo el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Volker Turk, pidió a las autoridades que garanticen que jueces y abogados del país puedan hacer su trabajo y rechazó que se utilicen procedimientos administrativos y penales en aparente represalia.

Este viernes 31 de marzo, el día de la visita de la presidenta de Taiwán a Guatemala, Human Rights Watch y la Oficina en Washington para Asuntos Latinoamericanos (Wola), llamaron a la comunidad internacional a intensificar sus esfuerzos para proteger la democracia del país, a medida que las autoridades guatemaltecas aumentan sus esfuerzos para perseguir críticos del gobierno y a excluir a candidatos presidenciales de las elecciones generales.

En Guatemala, Edgar Gutiérrez, excanciller y analista político, dijo que el gobierno de Giammattei, tiene como norma, «una política exterior aislacionista, pero selectiva y transaccional».

«La política de relaciones con Taiwán es para congraciarse con Washington y manteniendo las relaciones diplomáticas se convierte en el país más importante para Taiwán», señaló Gutiérrez.

Ese rol protagónico le permite al presidente tasar más alto su valor al negociar con las potencias occidentales «a cambio de que le toleren acabar de triturar la democracia en las próximas elecciones», enfatizó el excanciller.

Reacciones en China

Open Secrets, un medio independiente que rastrea los contratos de lobby alrededor del mundo, publicó que hubo molestia en China por la estrategia de Taiwán de pagar favores políticos a cambio de mantener aliados en la región.

En un polémico artículo de opinión, Timothy Kwai, exasesor del gobierno Chino insinuó que Taiwán «está comprando la amistad de Guatemala pese a su relación inestable con los Estados Unidos». El artículo provocó que el Ministerio de Relaciones Exteriores de Taiwán emitiera un comunicado condenando al China Times por publicarlo y difamar el apoyo de uno de sus aliados.

Autor
Edición
Autor
Edición