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Sucedió en Cuaresma

El único que gritaba: “¡Paz, paz!, ¡tranquilos muchá, tranquilos!”, era el diablillo quien vestido de rojo, trataba inútilmente que se detuviera la batahola
Tipo de Nota: 
Opinión

Sucedió en Cuaresma

18 de Febrero de 2013
Palabras clave

No soy el único que ha escrito acerca de esta anécdota pero, a estas fechas, soy uno de los pocos —con vida— que conoció a uno de los protagonistas.

La primera vez que supe de ella fue a mediados de los años setenta del siglo pasado y no recuerdo con exactitud si la leí en una revista conmemorativa (de alguna feria patronal o de la Independencia) o en algún periódico de algún pueblo del interior de Guatemala, de aquéllos que guardaron parte de la verdadera historia de estos pueblos mesoamericanos.

Sucedió en un lugar de cuyo nombre no quiero ni acordarme porque me gusta visitarlo con frecuencia y no vaya a ser... Es una ci...

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