“No me toca”

Ante las precariedades, solo resta ampliar los horizontes viendo que una mayor cobertura en el control de las instituciones es fuente de sobrevivencia, de más poder y recursos. Así vemos desfilar a familias, allegados, amigos y socios del primer círculo para tomar posesión de los niveles intermedios. Ese nivel es el más apetecible por el control y poca visibilidad que generan. No hay institución del gobierno central que se salve de esa situación. Solo basta con revisar los listados de las autoridades y personal de alguna unidad. Aparecen parentelas, novias, amantes, cuyas razones de adhesión son claras: ampliar o crear nuevas redes clientelares, garantizar relaciones de confianza para fortalecer espacios de impunidad.

Esa realidad, de la cual no se escapa gobierno alguno, se ha incrementado en forma acelerada. Lo peor de todo es la instalación de la lógica "no me toca”, “no me corresponde", "lo que se plantea no es de mi competencia". Se instala una lógica de la dispersión como espacio de representación tipo feudal. Las pocas posibilidades para sacar la cabeza del agua se vuelven inviables cuando los mismos funcionarios públicos son el principal freno, cuando solo miran su propio ombligo. Las iniciativas que anteponen el requerimiento de la coordinación son inoperantes en esa realidad institucional, donde priva la prioridad de la simple sobrevivencia, la defensa a ultranza de su chance, los codazos, trampas y zancadillas para limitar el desplazamiento de aquellos que amenacen su espacio, que se presentan como público pero son eminentemente de orden privado. Minar los otros espacios, para legitimar mí permanencia y mis intereses, es la premisa básica.

La administración pública termina siendo el lugar de cruentas batallas campales. Solo a pocos les sigue ilusionando objetivos de mayor alcance. Gran parte de ellos deciden no participar en las disputas pero declinan involucrarse en asuntos complicados. En su lugar, mejor se relegan, pasan a formar las filas de los invisibles. Entonces, ¿quién mira hacia adelante?