El significado de esta frase es intencionalmente simple ya que respalda una lucha plagada de complicaciones superficiales , esta lucha esencialmente es por la igualdad . La lucha de la cual hablo es el derecho de casamiento y reconocimiento legal de las uniones maritales de la comunidad LGBT ( Lesbiana, Gay, Bisexual y Transexual).
Este esfuerzo ha generado mucho debate en la última década, ya que las percepciones sociales en torno a las uniones homosexuales han evolucionado y cambiado drásticamente. A pesar que muchas personas consideran este tema controversial o tabú, las encuestas realizadas en varios países muestran no solamente que el tema cada vez es mas cotidiano si no que también existe un sentimiento favorable hacia la legalización del matrimonio homosexual. Por lo que actualmente vemos una tendencia global a legalizar dichas uniones con el fin de promover la igualdad entre todos los ciudadanos de un país, sin importar su sexualidad. Los mismo ciudadanos cada vez más perciben que el derecho al matrimonio es un tema meramente de igualdad de derechos humanos y por lo tanto no caben los argumentos seudo moralistas ni religiosos.
Un derecho que décadas atrás era inconcebible , se ha convertido en una realidad, en la actualidad con más frecuencia varios países han legalizado la uniones entre personas del mismo sexo. La sociedad global se ha convertido cada vez no solo más tolerante si no que también más progresist,a gracias a varios fenómenos culturales como lo es el acceso masivo a la información. A diferencia del pasado estatus, plagado por argumentos subjetivos, en la actualidad las personas tienen a su disposición recursos informativos que les permiten formar una opinión educada.
Han sido los mismos ciudadanos quienes le han exigido a sus representantes y servidores públicos que promuevan la igualdad entre heterosexuales y homosexuales. Es sumamente importante resaltar que países que han sido predominantemente religiosos y por ende conservadores también se están uniendo a este movimiento. Por ejemplo España y Portugal, dos países predominantemente católicos en el 2005 y 2010, ya legalizaron el matrimonio homosexual.
Estados Unidos por estar organizado como un Estado federal ha tenido un proceso interesante en cuanto a la legalización del las uniones y el matrimonio homosexual. El debate tiene varias dimensiones , no solamente se trata de si el matrimonio homosexual debe ser legalizado si no que quién tiene esa responsabilidad. Algunos políticos argumentan que la legalización debe ser responsabilidad individual de los estados, mientras que otros argumentan es una derecho constitucional por lo tanto debe ser asumido por el gobierno federal. En cuanto a la percepción de los ciudadanos, la mayoría estén o no a favor de la legalización creen que es un tema constitucional. La semana pasada, la Corte Suprema de los Estados Unidos escucho argumentos en dos casos relacionados con la legalización de dichos matrimonios. En ambos casos, la Corte debe dictaminar si prohibir matrimonios entre personas del mismo sexo es inconstitucional.
Un caso se trata sobre la prohibición de dichos matrimonios en California y el otro es sobre el reglamento nacional que dicta que el matrimonio es entre una mujer y hombre. La Corte tiene tres meses para deliberar, sin embargo la decisión de la misma aunque importante no necesariamente es determinante. La batalla la han ido ganando los activistas y los defensores de la igualdad ya que las percepciones de las personas han cambiado significantemente. Por ejemplo, nueve estados ya han legalizado dicho matrimonio gracias a las peticiones de los ciudadanos. Illinois fue el último en legalizarlo, curiosamente el día del cariño. Una encuesta realizada por Gallup en el 2011 mostró que el 53% de los estadounidenses apoyan la legalización del matrimonio entre personas del mismo sexo. Muchos políticos han tenido que repensar sus percepciones para ajustarse a lo que les piden sus constituyentes.
En mayo del año pasado, el presidente Barack Obama se convirtió el primer presidente de la historia de EEUU en declarar públicamente su apoyo a la legalización de dicho matrimonio.
En la región latinoamericana existen varios países que ya han legalizado las uniones civiles y el matrimonio gay . En Uruguay, Ecuador, Colombia y Brasil, las uniones entre personas del mismo sexo son reconocidas y en Argentina y México DF, el matrimonio gay ya es legal. En otros países como Chile y Venezuela, ya existen proyectos legales en el congreso en relación a dicho matrimonio. Esperemos que estas tendencias positivas y progresistas lleguen a nuestro país y al resto del Centroamérica.
La legalización del matrimonio gay no debería ser un debate de ideologías ni mucho menos de religión, es una tema meramente de derechos humanos y de igualdad. La diversidad de opiniones es sumamente importante en todo debate, sin embargo cuando éstas limitan la libertad e infringen los derechos de otros son inaceptables y deben ser severamente rechazadas. Todos los ciudadanos debemos sumarnos a esta lucha y apoyar que se respeten los derechos de todos nuestros compatriotas.
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