Así que, en vez de abordar un tema en particular, permítanme contarles un poco de los sucesos de la semana. Así llegarán al lunes muy al día.
Los que se fueron desde el Viernes de Dolores se perdieron la farsantería presidencial en el libramiento de Chimaltenango. A pesar de las prohibiciones taxativas constitucionales y de la ley electoral a la inauguración de obras en época de propaganda electoral, el presidente manoseó las palabras y le llamó a aquello una supervisión de rutina.
Supervisan obras los ingenieros. Los presidentes y ministros las inauguran para, acto seguido, permitir el libre paso por donde antes era obra en construcción. También afirmó que este trabajo es de alta ingeniería, como pocas en América Latina. No se ría, que esto es serio. Aparte de la ingeniería financiera, que elevó el costo por kilómetro lineal a niveles poco vistos en el continente, esta obra ni siquiera está terminada, por útil que sea así como está. ¿Se acuerdan de cuando el candidato prometía bellas cosas, como donar parte de su sueldo (hasta se lo aumentó fraudulentamente), reducir la desnutrición crónica en 10 % (en realidad aumentó), acabar con la corrupción y otras cosillas? Olvida él que su credibilidad y su aceptación están muy erosionadas y que no queda espacio para malabarismos semánticos.
Quizá se perdió el incendio de la catedral de Notre Dame, en París. Con las imágenes viralizadas no hubo quien dejara de lamentar la desgracia y comentar la importancia para el arte y la cristiandad de ese monumento histórico. Pero, ya sabe, la gente es crítica y no faltaron quienes mencionaran que nadie viraliza el actual incendio de los bosques del Petén, que también son patrimonio de la humanidad y sostén importante de la vida misma. Dijeron que quemaron vivas a 47 niñas y que ese incendio fatal, como las escobas, fue puesto detrás de la puerta para no afear la vista.
Mientras cada quien usaba el asueto según podía o le quedaba mejor, la Juventus de Turín fue eliminada de la Liga Europea de Campeones. La gente gritaba como loca en Madrid, Barcelona y Holanda. Ya ve, pues: el futbol despierta pasiones y euforias arrebatadoras y por eso es tan importante para distraer a la población de los problemas urgentes.
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Esto tal vez no sea tan novedad, pero aumentó de nuevo el precio de la gasolina. Y hay indicios de que la curva de precios seguirá ascendiendo a causa de una caída de inventarios de combustible (no de producción de petróleo). ¿Le conté que Messi metió dos goles y que también eliminaron al Manchester City?
Otra noticia fue que los accidentes de tránsito son la segunda causa de muertes violentas en Guatemala. Es que la gente confunde pericia con imprudencia y calles públicas con consolas de videojuego.
Apuesto a que, para muchas personas (particularmente para aquellas responsables de proteger a niños y jóvenes), lo que sigue serán números y nada más. Según el Inacif, en lo que va del año ha evaluado a 1,343 niños, niñas y adolescentes para certificar violaciones y violencia sexual (más que el año pasado). La edad arranca en cero meses. Entre tanto, partes críticas del decreto 09-2009, Ley contra la Violencia Sexual, Explotación y Trata de Personas, continúan ilegalmente en suspenso por falta de capacidades y de presupuesto. También se informó que, durante el año pasado, 116,773 niñas entre 10 y 14 años resultaron embarazadas producto de la violencia sexual. Entre tanto, los diputados y empresarios criminales se reparten obras sobrevaloradas, una prioridad en el presupuesto público. Y le piden el voto.
La bomba de la semana fue la captura del candidato presidencial de la UCN en los Estados Unidos. Esta vez abundan detalles de todo lo que dijo Mario Estrada a agentes federales encubiertos y disfrazados de narcos sinaloenses. Hasta pidió asesinar a dos candidatos que lo aventajaban en las encuestas. ¡Vaya autorretrato involuntario de los políticos tradicionales que quieren nuestro voto para servir a la patria!
Bueno, ya les conté.
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