DETRÁS DEL ESPEJO
Entidades internacionales, como la Organización de las Naciones Unidas (ONU) y la Organización de los Estados Americanos (OEA), promueven proyectos y estudios diseñados para afrontar la inseguridad. La OEA, en los últimos años, se ha involucrado en diversos proyectos diseñados para resolver la temática de la violencia en el continente. Estos se han desarrollado durante reuniones en las que se discute la temática y se determinan posibles soluciones para los países afectados.
En estas reuniones participan personas que forman parte de los gobiernos de los países miembros, por ejemplo, presidentes,vicepresidentes, ministros de seguridad, embajadores y diplomáticos. Me parece importante que se realicen estas reuniones, ya que crean un espacio no solo de dialogo sino de acción, en donde países con características similares pueden afrontar una problemática de manera regional. Por ejemplo, sabemos que en nuestros caso el problema del crimen organizado y el narcotrafico debe ser solucionados de manera regional.
Es por esto que durante los últimos años se han realizado reuniones de este carácter en diferentes puntos de la región. Por ejemplo, del 26 al 27 de noviembre de 2008, en Santiago Chile, se realizó una reunión en donde fueron convocados por la Secretaría General de la OEA 13 académicos y expertos provenientes de nueve países de Latinoamérica, para discutir las diferentes políticas públicas necesarias para combatir la violencia. Según la OEA, “el propósito de la reunión era fomentar una discusión sobre los temas/problemas dominantes de seguridad pública de la región y generar ideas y propuestas que pudieran servir como insumos para la construcción, por parte de los Estados miembros de la OEA”. Durante la reunión se trató el tema de la relación del Gobierno y la erradicación de la violencia.
La mayoría de académicos y expertos llegaron a la conclusión de que es responsabilidad del Gobierno promover políticas públicas efectivas que puedan combatir este mal. Sin embargo, también resaltaron la negligencia de parte de varios gobiernos latinoamericanos hacia la protección ciudadana. La conclusión de los expertos fue muy resonante a lo que nos ocurre en la actualidad en nuestro país,“ la falta de institucionalidad apropiada” le facilita el acceso al crimen y a la violencia los canales de dispersión dentro de la sociedad. Me parece importante resaltar que durante esta sesión los expertos enfatizaron la importancia que debe tener la participación ciudadana en la erradicación de la inseguridad. La ciudadanía debe trabajar en conjunto con el Gobierno para realmente impulsar políticas públicas que sean integrales.
La OEA continua con su compromiso en América Latina contra la inseguridad. Por lo tanto, dentro de la agenda de reuniones realizó la “Primera Reunión Interamericana de Ministros Responsables por la Seguridad Pública”. Esta reunión se llevó acabo en la ciudad de México, el 7 y 8 de octubre de 2008, con la representación de algunos miembros del Gobierno del presidente Felipe Calderón y con la representación de la OEA a través del secretario general, Miguel Insulza. A esta reunión asistieron los miembros encargados de la seguridad pública de los 34 países que pertenecen a la OEA. Esta reunión sirvió como un foro en el cual los diferentes países expusieron sus experiencias individuales y sus puntos de vista relevantes a la problemática de la violencia.
Durante esta reunión, Insulza atribuyó la dispersión de la violencia dentro de las sociedades latinoamericanas a las instituciones débiles del Estado, a las pobres y carecientes políticas públicas de seguridad y a la falta de información de las instituciones de seguridad. En relación a las instituciones, señaló que no solo se deben fortalecer las instituciones de seguridad, como el Ministerio o la Policía Nacional, sino todas las instituciones democráticas del Estado. Si en estas no existe la transparencia, los ciudadanos pierden la fe en ellas y se vuelven inestables.
Los participantes concluyeron que debe haber una drástica mejoría de parte de los gobiernos en cuanto a la creación de políticas públicas diseñadas para combatir la inseguridad ciudadana. Estas políticas deben tener un carácter integral, y abarcarán por separado todos los niveles y tipos de violencia que perturban a nuestros países. Sin embargo, el componente que determina el éxito de dichas políticas públicas es su financiamiento. Como bien señaló el secretario general, estas políticas “deben ser adecuadamente financiadas” es “imprescindible que exista una adecuada correlación entre la magnitud del problema de la inseguridad ciudadana y la asignación presupuestal”. Los participantes concluyeron que la capacidad de información debe ser mejor entre las instituciones de seguridad. Con este propósito, se podrá agilizar los diferentes procesos de justicia y denuncia dentro de los paísesy la creación de una red de información entre toda la región para que todos los países puedan compartir información relacionada con la violencia y la inseguridad.
Entiendo que existen críticas hacia la OEA. Sin embargo, me parece un insumo valiosísimo para nuestros países la creación de estas conferencias. Especialmente, por que dichas reuniones tratan específicamente el tema de violencia e inseguridad, los cuales tienen acongojadas a nuestras sociedades. Como expuse anteriormente, estas reuniones permiten que los países compartan sus experiencias, insumos y construyan soluciones a nivel nacional y regional. La organización a la cual pertenezco, la Red Nacional por la Integridad, fue seleccionada para participar en la XLI Asamblea General de la OEA sobre la Seguridad Ciudadana en las Américas. En esta ocasión estaremos representando a la sociedad civil y tendremos oportunidad de tener un diálogo con el secretario general. En la tercera parte de esta serie de columnas les compartiré nuestra experiencia en dicha reunión y los insumos que recibamos.
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