La política exterior en campaña

Ambas Convenciones se enfocaron más en aspectos ideológicos que en los temas que realmente definirán esta elección: la economía, la política fiscal y el seguro social. Pero, pensando en cuestiones que nos pueden afectar a nosotros en Guatemala, debemos hacer una revisión general de las propuestas de política exterior.

El discurso de Obama no ha cambiado mucho, el mismo se centra en una salida decorosa de Afganistán y de Irak, lo que no significa una retirada total de la presencia militar en aquellos países, pero sí una presencia diplomática sólida. Aparte de esto, Obama busca recuperar el liderazgo económico que Estados Unidos ha mantenido a nivel mundial desde el final de la Segunda Guerra Mundial. Para esto buscará alianzas estratégicas en Asia, particularmente para hacerle frente, de una forma discreta pero consistente, a China. América Latina seguirá jugando un papel secundario, en donde se mantendrán las políticas de la guerra contra las drogas, y en el ámbito comercial, habrá restricciones no arancelarias. Para Guatemala en particular, los capítulos 16 y 17 (laboral y ambiental) del DR-CAFTA, seguramente seguirán causando estragos en la aplicación de dicho tratado de libre comercio.

Romney, por otro lado, está apostando por una política más agresiva, con características similares a la política exterior de Bush hijo. Sin embargo, los cambios en el sistema internacional, presentarán ciertas restricciones para el accionar de los Estados Unidos, tomando en cuenta que la guerra contra el terror ha ido perdiendo fuerza y la crisis económica se mantiene. Aun así, la agenda exterior republicana puede causar algunas alteraciones en el Medio Oriente, con casos como el de Siria, Irán y el conflicto árabe–israelí, que a lo sumo pueden afectar negativamente los precios del petróleo. La política con América Latina se mantendrá igual, y la presión sobre nosotros para entrar de lleno en la guerra contra las drogas, será mayor.

Desde la perspectiva de los Estados Unidos, y en particular de los votantes indecisos, Obama sigue representando un candidato de transición. Romney, en cambio, no ha logrado concretar una agenda política exterior, que siempre ha sido un bastión de los republicanos, que lo distancie de la administración Bush hijo. En política exterior, los votantes preferirán a Obama.

De igual forma, nosotros no entramos en los planes directos de la Casa Blanca, solamente figuramos dentro de la Oficina de Asuntos del Hemisferio Occidental del Departamento de Estado. Esto implica, que nuestra atención debe estar dirigida a estrechar nuestras relaciones con nuestros vecinos inmediatos y con América del Sur, y no esperar de brazos cruzados a que el Tío Sam nos voltee a ver.