La Asociación Médica de Alta Verapaz, el Sindicato de Trabajadores de los Servicios de Salud, el Observatorio de Salud Reproductiva —OSAR— y las universidades que tienen carreras relacionadas con la salud —organizadas como Mesa de Rescate del Hospital de Cobán— salieron al paso y pusieron en marcha acciones estratégicas para rescatar aquello que de hecho y por derecho nos corresponde. Entre ellas, sentar al Viceministro de Hospitales y al Viceministro Administrativo del Ministerio de Salud Pública y Asistencia Social con algunos diputados de Alta Verapaz para dialogar acerca de esa perversa «decisión superior» que tiene buqué de «decisión inferior y a compadre hablado». Esta reunión se llevó a cabo en el Salón del Pueblo del Congreso de la República el día 26 de julio recién pasado. Dicho sea, la sesión no se concluyó.
No argüiré acerca de posibles logros de la Mesa (aún no los hay), excepto que el 26 de julio quedó agendada una visita al Hospital Regional de Cobán por parte de los viceministros mencionados para continuar en Cobán la reunión que no se pudo concluir en el Congreso (este artículo lo escribí, por razones de edición, el 28 de julio 2022). Según la Presidenta de la Asociación Médica de Alta Verapaz, la Dra. Patricia Cortés, los funcionarios en mención no conocían el hospital de Cobán. No hasta ese día. Cuando me enteré pensé: «¡Carajo! ¿Cómo es posible que tengamos viceministros de salud que no conocen un hospital de referencia que está bajo su cargo (cuando menos del subtitular de hospitales)?». Así las cosas, esperaré los efectos que vaya a tener esa visita para seguir porfiando. Se avizora un escándalo a ojos vistas y nadie tiene conocimiento de quién, cómo y por qué tomó semejante decisión.
Cabe mencionar que nosotros (la población altaverapacense) no estamos escamoteando el derecho que tiene Petén o cualquier otro departamento a tener lo suyo. Hemos visto en las redes sociales un manifiesto de los alcaldes municipales de Petén en contra de algunos diputados de Alta Verapaz acusándolos de oponerse a «la construcción del nuevo hospital regional en el municipio de San Benito». Preocupa el manifiesto y preocupa su tono. Petén y Alta Verapaz han sido departamentos no solo vecinos sino departamentos hermanos. Nos han unido vínculos históricos, de familiaridad, académicos y también de sufrimiento porque atávicamente hemos sido olvidados y relegados por los gobiernos de turno. Por tal razón hago un llamado a los alcaldes peteneros a no dejarse manipular. Repito, esa «decisión superior» tiene buqué (para no utilizar una adjetivación más grosera) de compadre hablado y de carcomas de la oscuridad.
El edificio actual del Hospital Regional de Cobán se estrenó en 1978. Yo era estudiante en Ejercicio Profesional Supervisado en el entonces Centro de Salud de San Juan Chamelco y cuando se dio luz verde al traslado, todas, absolutamente todas las personas que estábamos involucradas en el sector salud acudimos al «viejo hospital» para clasificar los enseres que allí había, rescatar aquellos que pudieran ser útiles y transportarlos al nuevo edificio. Semanas más tarde yo ayudé a su director, el Dr. Mario Enrique de la Cruz Torres (†), a realizar la primera safenectomía en uno de los nuevos quirófanos. Se colige entonces que 44 años han pasado y no de balde. El edificio no da para más, aunque ahora quizá esté medio remozado para dar una buena impresión a los viceministros durante su visita.
Llamo entonces a los diversos sectores de la población para que apoyemos a la Mesa de Rescate del Hospital de Cobán en el entendido que: No estamos escamoteando el derecho que tienen otros departamentos a tener su propio hospital, no debemos dejarnos dividir, no tenemos que permitir que políticos partidistas aten los yugos de sus bueyes a los buenos propósitos de la Mesa con vistas a las próximas elecciones generales, y además, debemos exigir al ministro de salud, a sus viceministros y a los diputados de Alta Verapaz que sean francos y honestos. Los diputados (principalmente los oficialistas) y las autoridades ministeriales tienen que explicarnos quién, cómo y por qué decidió semejante aberración (porque soporte técnico parece no haber).
Por favor, no se confunda nuestra paciencia con torpeza.
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