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Guatemala, un mal país para trabajar y exigir derechos

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Guatemala, un mal país para trabajar y exigir derechos

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El año pasado, Guatemala recibió el título del país más peligroso para ser un sindicalista. Este 2014, un nuevo estudio revela que en el país no se garantizan los derechos laborales y recibió una mala calificación.

El Índice Global de Derechos Laborales, publicado por la Confederación Sindical Internacional (CSI) asegura que los trabajadores de Guatemala tienen poco acceso al reclamo de sus derechos y están expuestos a prácticas laborales injustas. El estudio posicionó a Guatemala en el grupo 5, el de los que obtienen la peor clasificación posible entre los países que no están en conflicto armado.

Junto a Guatemala, en el grupo 5, se encuentran 24 países, entre éstos Camboya, Bangladesh y Qatar; y, junto a Colombia, son los únicos de América Latina en ocupar esta clasificación. En 2013 el indicador de membresía sindical ―cantidad de trabajadores sindicalizados― se situaba en el 1.6% de la población con trabajo; y  sólo el 17% de los 389 sindicatos activos  habían llegado a un acuerdo de negociación colectiva.

En marzo de este año  la Organización Internacional del Trabajo (OIT) decidió posponer por seis meses la decisión de enviar a Guatemala una  Comisión de Encuesta  que se encargaría de revisar el cumplimiento del convenio sobre libertad sindical y la protección de este derecho. La OIT también canceló  la visita de una comisión que tenía prevista para realizar una inspección en marzo de este año, luego de que Guatemala presentara un informe sobre avances en el tema. La Comisión de Encuesta es el máximo sistema de sanción en contra de un país que la OIT establece.

El estudio de la CSI mide la capacidad de cada país para violar, en la práctica y a través de su legislación, las libertades civiles y de afiliación a sindicatos. También estima la capacidad del Estado para garantizar los derechos de huelga y negociación colectiva.

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