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De cocina y otras hierbas

La crítica era contra cualquier signo de supeditación y sumisión al varón, entre ellas las faenas del hogar (lo cual dicho de paso no deja de ser válido), la readaptación a nuevos roles como inmigrante me hacen (re)apreciar el feminismo de una manera diferente
Tipo de Nota: 
Opinión

De cocina y otras hierbas

13 de Agosto de 2013
Palabras clave

Como cualquier otra persona criada en esa clase media tan de boga últimamente, resulta que nunca tuve que cocinar y por lo tanto no desarrollé gusto ni inclinación alguna por las artes culinarias pues no lo necesitaba.

Doña Concha se encargaba de preparar las tres comidas de lunes a viernes. Los fines de semana, cuando se iba de descanso, comíamos lo que nos ella nos dejaba preparado, lo que se ajustaba con algo que mi mamá nos preparaba, como esos hichintal envueltos en huevo con recadito frito que ahora añoro; o los huevos revueltos con tomate con los que mi papa salía a batear en casos de necesidad. Admito que esperábamos con ansia los fines de semana pues sabíamos que a falta de cocinera, podíamos pedir...

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