Carlos Pineda y su desfile a caballo en el feudo de un candidato de Vamos
Carlos Pineda y su desfile a caballo en el feudo de un candidato de Vamos
Carlos Pineda, el presidenciable de Prosperidad Ciudadana (PC), protagonizó un desfile hípico realizado en Palencia, un municipio donde el partido que lo postula no tiene candidato y en el que el alcalde busca su cuarta reelección con Vamos. Plaza Pública documentó la actividad de campaña electoral, aunque Pineda insiste que no es política.
Carlos René Pineda Sosa se esfuerza por mantener una sonrisa cada vez que alguien se le acerca con un teléfono a tomarle fotos o grabar videos, mientras trata de montar con dificultad el caballo frisón con el que encabeza el desfile hípico en la feria titular de Palencia, Guatemala, la mañana del 30 de abril.
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Más tarde dirá que su presencia en la actividad no obedeció a algo político, aunque junto al candidato presidencial de PC va todo el equipo de campaña que transmite por redes sociales sus movimientos, regalan lápices a quienes observan el desfile y alientan a quien esté cerca para sacarse fotografías con él.
Frente al candidato va un picop con banderines del partido y un letrero que dice «Carlos Pineda, presidente». También hay una camioneta agrícola negra en la que se transporta Pineda y una patrulla de la Policía Nacional Civil (PNC). Carlos Pineda lleva una camisa blanca con el logotipo del partido, un sombrero ancho y gafas oscuras. Saluda a las personas a la orilla de las calles principales de Palencia y da órdenes a sus colaboradores. A Pineda lo escoltan en todo momento dos jinetes, que se identifican como Gonzalo y Armando Montoya.
Los caballos bailan al ritmo de narcocorridos, los asistentes también. Una docena de hombres rodean al candidato, todos visiblemente armados —lo cual es una falta según la Ley de Armas y Municiones—, incluso los dos colaboradores que se encargan de transmitir por redes sociales portan pistola.
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El 12 de abril, el candidato denunció en redes sociales que descubrió un plan para asesinarlo. «Me enteré que me mandaron a matar», dijo. Aseguró que la información provenía de tres fuentes «genuinas». En el video ofreció que si alguien sabía quién contrató a la organización que lo asesinaría, aunque ninguna de las fuentes genuinas le dio el nombre, pagaría 300,000 quetzales de recompensa, como si él mismo fuera un sheriff a cargo de la seguridad del pueblo, o más bien como el dueño de una finca donde la investigación del Ministerio Público (MP) no llega.
Además de los caballos, en el desfile están presentes personajes que participaron en gobiernos anteriores, es decir, la vieja política de la que Pineda dice estar completamente alejado.
Uno de los personajes que graba los movimientos de Pineda es Cristian Alexander Aguilar López, candidato a diputado en la tercera casilla de la Lista Nacional del partido PC. Es uno de los personajes más allegados a Pineda, fue viceministro de Comunicaciones en el gobierno de Jimmy Morales e integró el Comité Ejecutivo Nacional del Frente de Convergencia Nacional (FCN-Nación).
El padre de Cristian, Ramón Conrado Aguilar Reyes, es también exfuncionario del gobierno del FCN-Nación y candidato a diputado al Parlacen con PC.
En la misma lista de candidatos al Parlacen aparece María Alma Judith Flores Porras, madre del actual diputado suplente al Parlacen por la UCN, Freddy Arnoldo Salazar Flores, solicitado en extradición por Estados Unidos, país que lo acusa de almacenar y transportar embarques de cocaína, en representación de la organización de narcotráfico Los Huistas.
Pineda no sonríe todo el tiempo, por momentos luce serio y hace gestos de molestia cuando sus colaboradores no están cerca. Durante todo el desfile, a su lado va un hombre que le provee bebidas y otro integrante de su seguridad sostiene al caballo para que este no se mueva.
El candidato se detiene frente a un grupo de personas que observa los movimientos desde la parte trasera de un picop, les pide una cerveza y enseguida se la toma. Hace un gesto con la cabeza para continuar el desfile y sigue el recorrido.
Otra de las personas que acompaña al candidato de PC es Guillermo Danilo Gutiérrez Orozco, el enlace de Pineda con los medios de comunicación. Gutiérrez también es candidato a diputado en la segunda casilla del Distrito de Guatemala. En 2020 y 2021 fue asesor de la Comisión de Asuntos Municipales del Congreso.
El desfile lleva hora y media de desarrollo, es casi mediodía. Pineda tiene sed y pide más cerveza. Su equipo le da una lata. Pineda bebe y brinda con el público. Acaba de saludar a un grupo de personas con camisas del partido Cabal, que postula como presidenciable a Edmond Mulet. En el resto del camino se encontrará con grupos de otros dos partidos políticos, Vamos y Victoria. Solo saludará al segundo, aunque de lejos.
A la par de Carlos Pineda, un sujeto que acompaña al candidato hasta el final del desfile, alienta insistentemente a los jóvenes que observan el recorrido para que se tomen fotos con el candidato. «¡Acérquense, háblenle!», les repite. Su nombre es José Rubén López Asencio, empleado permanente en la Dirección General de Aeronáutica Civil (Dgac), quien dice a Plaza Pública ser asesor de Pineda, aunque al final del recorrido sus compañeros lo reprenden y le reprochan haber declarado a un medio de comunicación algo que aseguran, es falso.
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El territorio de un alcalde oficialista
El presidenciable de PC no solo encabeza el desfile en Palencia, sino que es el único candidato que participa en la actividad hípica. Justo al mediodía, Pineda llega a la calle principal de Palencia. Se toma otra cerveza en lata y vuelve a hacer un gesto de brindis hacia el público.
Sobre una tarima al lado de la calle y a pocos metros, se encuentra la presidenta del Congreso y candidata a la reelección con Vamos, Shirley Rivera, quien este día también ha elegido este municipio para hacer campaña. Rivera está junto a los integrantes de la corporación municipal de Palencia.
Pineda espera unos minutos antes de seguir la marcha y amaga con retroceder, pero finalmente avanza. La diputada no participa en el desfile y la única actividad de campaña que realiza es pararse en la tarima adornada con los colores de Vamos y hacer la señal del partido oficialista con la mano: el puño derecho empuñado solo con el índice extendido. El candidato de PC pasa frente a Rivera, a quien observa por unos segundos y saluda de lejos.
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Pineda, quien se postula por primera vez como presidenciable, está en un territorio donde el PC carece de un candidato a la alcaldía. El jefe edil de Palencia, Guadalupe Alberto Reyes, es un viejo conocido en la política nacional: suma 20 años en la silla principal de la municipalidad, fue presidente de la Asociación Nacional de Municipalidades (Anam) durante el gobierno de la Unidad Nacional de la Esperanza (Une), partido con el que «Beto Reyes» ganó en tres oportunidades. En 2015, Reyes ganó la elección con el partido Lider, de Manuel Baldizón. Ahora compite con Vamos, pero hoy el protagonismo es para Carlos Pineda, a quien dice conocer desde hace años.
Alberto Reyes tiene un perfil bajo en el desfile hípico de su propio feudo. No va a caballo y optó por conducirse en un vehículo en el que se transportan las reinas de belleza que participan en la feria. Cuando Plaza Pública le preguntó al alcalde por la participación de Pineda en el desfile, respondió: «Yo no tengo ningún sesgo político. Yo tengo mi participación y mi pertenencia política, pero eso es en otro momento. Esta es una feria, hay candidatos de distintas ideologías y participación política. Algunos que ya conozco y otros que veo por primera vez y todos son bienvenidos».
Pineda, al igual que Reyes, asegura que su participación se debió a que organizaciones ganaderas lo invitaron al desfile hípico.
De desfile en desfile
En los últimos días, Carlos Pineda ha participado en cuanto desfile hípico ha podido. El 28 de abril estuvo en la zona 18 capitalina, un día después en el de la feria de La Unión, Zacapa; hoy está presente en Palencia y un día después acudirá al de Chiquimulilla, Santa Rosa.
Carlos Pineda también compartió desfiles de este tipo junto a otro candidato cuestionado que busca ser diputado por Zacapa. Se trata de Jorge Arturo Tobar Sosa, quien fue capturado en 2011 en el Aeropuerto Internacional La Aurora, cuando intentaba viajar a Panamá con 11,000 dólares en efectivo sin declarar. Según una publicación del diario elPeriódico, Tobar Sosa, quien también fue funcionario en el gobierno de Jimmy Morales, fue condenado por lavado de dinero en 2013.
Pineda es un empresario dedicado principalmente al transporte, aunque también es propietario de fincas, según sus publicaciones en redes sociales, su principal plataforma para promover su imagen desde antes de la convocatoria a elecciones generales, en enero de 2023.
En el desfile de Palencia hay algarabía: narcocorridos estridentes, alcohol, caballos de raza, jinetes con atuendos ostentosos como ropa de marca, joyas brillantes y hombres rodeados de guardaespaldas con armas sofisticadas exhibiéndolas al público en todo momento.
Un ejemplo de la excentricidad de los desfiles hípicos son los caballos frisón como el que monta Carlos Pineda. Un ejemplar de esta raza puede llegar a costar hasta 47,000 dólares (373,620 quetzales), según la página electrónica hussespain.com.
La escena del desfile de Palencia no es nueva, sino muy común en las ferias patronales, principalmente del oriente y nororiente guatemalteco. Los desfiles históricamente han formado parte de la cultura en esas regiones del país, aunque ahora son un reflejo de la «cultura narco» que por lo regular tienen sus raíces en un problema más profundo en Guatemala: «En la mayoría de los casos, los jefes de los cárteles desarrollaron relaciones de clientelismo y compadrazgo con algunos funcionarios del Estado, empresarios y miembros de las élites locales», según el libro Territorio, actores armados y formación del estado, de la historiadora y socióloga Matilde González-Izás.
En la actividad también se promocionan empresas como bancos, cooperativas de ahorro y tiendas de accesorios para caballos. Todo ocurre en el mismo escenario en el que diferentes candidatos a cargos públicos desarrollan sus campañas electorales.
Al final del desfile, antes de que aborde su helicóptero rumbo a una nueva actividad política, Plaza Pública aborda a Pineda y le pregunta sobre su presencia en el lugar: «Hay asociación de ganaderos, los encargados, los organizadores tuvieron a bien invitarme. No se trata de nada político. Vengo con la camisa del partido, pero porque vengo de una actividad en Chiquimula. Aterricé en el campo, ya no había tiempo de ir a Guate, ya los caballos estaban listos. Compartí con tanta gente hermosa, me tomé muchísimas fotos», responde.
Dos días antes, un sondeo sobre intención de voto elaborado por Nuestro Diario, ubicó a Carlos Pineda como el candidato presidencial con más preferencia. La encuesta elaborada por Prensa Libre lo ubica también en el primer lugar entre los electores, con el 23.1% de la intención de votos, por encima de Sandra Torres de la Une, con el 19.5%. Pineda cuenta que cada 15 días su equipo mide la intención de votos y sostiene que su candidatura «va en una tendencia para arriba». Aunque el candidato tiene fuerte presencia en redes sociales, en sus mítines de campaña no se observa una gran cantidad de personas.
Cuando Plaza Pública le pide a Carlos Pineda una cita para realizarle una entrevista para ampliar sus propuestas y conocer más a profundidad su perfil y planes de trabajo, el candidato que ofrece ser abierto con la prensa borra la sonrisa y de inmediato pregunta a su equipo de trabajo: ¿Quién financia a Plaza Pública, muchá? El candidato Cristian Aguilar grita: «¡La Une le paga!» y en seguida esconde la cara.
Al preguntarle sobre la aseveración de Aguilar, Pineda sale al paso y dice con desdén «porque así pasa, va vos. Bueno, vos no lo sabés tal vez. Pero de repente sí y de repente no, pero no importa».
Pineda responde que buscará un espacio en su agenda para, posiblemente, acudir a una entrevista con este medio, antes de preguntar: «¿Me llevo el lápiz o llevo los guantes? Vos me decís. A mí me da igual». De nuevo se toma fotografías con personas que se encuentran al final del desfile. Se retira y su grupo de colaboradores hace lo mismo.
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