Muchas cosas han pasado en estos tres años y estar en la Plaza me ha dado la oportunidad de tener nuevas perspectivas, conocer lugares y hacer amigos entre el caos que es el día a día en Guatemala. El nombre de la actividad de aniversario el pasado martes era “Dónde nos encontramos?” y en mi opinión, nos encontramos cada vez mejor. En el país, vamos mejorando, aunque sea a paso lento, aunque a veces sintamos que no hemos avanzado ni un milímetro. Éste es el momento en que podemos platicar, debatir, decir “esto no me gusta” y proponer soluciones, con más libertad que nunca en la historia de Guatemala. Podemos hacer algo como lo del martes, con personas muy distintas y muy similares a la vez.
Con esto no digo que todo sea ideal, pues aún persisten miedos y limitaciones, aún existe la exclusión y la desigualdad y la corrupción y la desnutrición y tantas cosas más. Nos falta un largo camino por recorrer, pero donde nos encontramos ahora, no es un lugar terrible. Plaza Pública hizo un cambio significativo en los medios de comunicación del país; con altibajos y dificultades, con ganas de jalarse el pelo a veces, pero siempre con la premisa de hacer un buen trabajo, innovando y atreviéndose a ir a donde muchos no se atreven. Me siento dichosa de haber podido ser parte de eso. El equipo de trabajo ha cambiado, unos se han ido, otros se han quedado, otros han llegado y todos han contribuido a que esto sea lo que es hoy.
Ahora, ha llegado para mí la hora de dejar la Plaza y seguir caminando. No la dejo en verdad, porque es un punto de referencia en mi vida, porque aquí he aprendido más de lo que pude imaginar el día que fui a esa entrevista a finales del 2010. Fue un gusto formar parte del grupo de columnistas de la Plaza, aprendí mucho de todos los valientes que se han lanzado a escribir, poniendo su nombre y su cara y sus ideas en este país de “sálvese quien pueda”. Dejaré de escribir esta columna, agradeciendo a todo aquel que se tomó un tiempo para leer lo que publiqué, a todos los que comentaron, los que me recomendaron qué leer, qué ver y qué escuchar y que me hicieron crecer aún más. Hoy, después de más de 40 artículos publicados, he decidido que es el momento de seguir adelante y deseo que otros tengan la oportunidad de alzar la voz y contribuir, no sólo a Plaza Pública sino al debate en el país. Por mi parte, me voy caminando, con la sonrisa puesta y los ojos bien abiertos. Gracias a todos y hasta pronto.
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