¡Bienvenida la Filgua 2023!

Como todos los años, estará organizada por la Asociación Gremial de Editores de Guatemala y el país invitado este año es El Salvador. Será dedicada a Dante Liano, escritor guatemalteco en cuyo haber literario se encuentra el Premio Nacional de Literatura 1991y haber sido finalista en dos ocasiones del Premio Herralde de Novela 1987 y 2002.

Desde la academia, «Dante Liano ha sido docente de Lengua Española en la Universidad de Bolonia, Lengua y literatura española en las universidades de Feltre y Brescia, Literatura Hispanoamericana en la Universidad de Milán y de Literatura Española y Literatura Hispanoamericana en la Università Cattolica del Sacro Cuore»[1]. La reseña de sus estudios académicos y de sus obras publicadas nos agotaría el espacio de tres o cuatro artículos. Así que, su escogencia para dedicarle la Feria Internacional del Libro 2023 es incuestionable.

¿Por qué nos alegra tanto cada edición de la Filgua? «La esperamos como agua de mayo» me dijo el año pasado un alumno del Campus San Pedro Claver, de la Universidad Rafael Landívar. Para responderle y responderme, repasé tres artículos[2][3][4]que acerca de dicha feria había escrito antes y encontré las razones que expongo a continuación.

1. La Filgua es del pueblo. El pueblo se siente bienvenido, acogido y a sus anchas. No hay distinción de clases sociales y se respira fraternidad.

2. Se ha posicionado como un factor de desarrollo de los pueblos. No hay departamento, no hay municipio donde se ignore de la Filgua. Los concursos de lectura, el fomento de las bibliotecas, el uso adecuado de las redes sociales, los talleres de profesionalización para bibliotecarios y muchas otras actividades similares se han constituido en oportunidades de oro no solo para las grandes urbes sino también, para la población más desposeída.

3. Las actividades Filgua Adentro. En 2017 fui testigo de cómo la Filgua llegó al interior de la república. Fui a departir (literariamente) con el escritor mapuche Javier Milanca a un instituto bilingüe intercultural localizado en Cuilapa (fuimos en representación de la Filgua, bajo la cobertura Filgua Adentro). Javier, brillante maestro de primaria y escritor, logró una interacción con los alumnos de tal magnitud que en menos de 40 minutos consiguió que aprendieran y cantaran una canción que expone segmentos de la cosmovisión mapuche. Muchos centros similares fueron visitados por otros escritores.

4. Es un lugar de reciprocidad entre escritores. Implica intercambio de experiencias y conocimientos. Participan en la Filgua escritores jóvenes, noveles y experimentados. Tienen la oportunidad de conocerse y relacionarse. Y permite a los literatos contactar editoriales. Para muchos, ocasión única que no se repite hasta el año siguiente. Esta es una de las causas por las que se le espera «como agua de mayo».

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De las cuatro razones expuestas puedo dar fe porque las he vivido a cabalidad. Entre mis mejores experiencias, exponer una de mis obras y también participar como comentarista en la presentación de la novela La gobernadora. Esta obra, de la doctora Mirta González Suárez, profesora emérita de la Escuela de Psicología de la Universidad de Costa Rica, tiene como riqueza relacionar dos siglos a través de terribles sucesos que acontecieron y se vuelven a repetir, tanto así que se pueden asumir como omnipresentes en América Central. Mirta nos relató en esa ocasión las vicisitudes que ya había declarado a la prensa en su país: «Su interés por el tema surgió cuando encontró en la biblioteca el Libro viejo de la fundación de Guatemala y papeles relativos a don Pedro de Alvarado, en el que se hablaba de una mujer que fue nombrada gobernadora de Guatemala en 1541. González quiso saber más sobre el personaje de Beatriz de la Cueva, por lo que, después de averiguar sobre su vida, la incluyó en su novela como punto de anclaje entre los dos espacios temporales»[5].

¿Qué otro escenario en Guatemala podría proveer tanta riqueza y diversidad de encuentros?

Vale la pena recordar que la Asociación Gremial de Editores de Guatemala es la garante para llevar a buen puerto la Feria Internacional del Libro en Guatemala pero, la responsabilidad última de fomentar la lectura en nuestro país le corresponde al Estado. Sobrada causa para que este provea todo el soporte que la Gremial necesita.

Así el contexto, ¡bienvenida la Filgua 2023!