Un mundo más feliz: voluntariado en el centro de la nueva agenda de desarrollo

Nosotros, los voluntarios movilizados en todo el mundo, hemos jugado un papel fundamental posicionando las voces de las personas más vulnerables en las consultas realizadas por las Naciones Unidas y que han inspirado los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS). Nuestra contribución ha sido fundamental para convertirla en una agenda inclusiva, en la cual todas las personas (sin dejar ninguna atrás) están representadas y sus voces plasmadas en el centro del desarrollo.

Existen múltiples herramientas (innovación, conocimiento técnico, habilidades sociales, etcétera) para expandir, movilizar y comprometer a las personas en la consecución de la paz y el desarrollo sostenible. La práctica del voluntariado es fundamental para conectar a la ciudadanía con los Gobiernos que la representan, de tal modo que ayuda a fortalecer la rendición de cuentas, alza las diferentes voces de las comunidades y construye un capital humano responsable con metas en el 2030.

El último Informe sobre el estado del voluntariado en el mundo 2015 demuestra que, cuando el voluntariado se integra, por ejemplo, en los planes de gobierno y en las estrategias de desarrollo, su poder se ve reflejado en avances en áreas como educación, salud, gobernanza, reducción de la pobreza, equidad de género, consecución de la paz y aumento de la seguridad ciudadana a nivel local y regional.

Los 17 ODS a alcanzar y un plan de acción desarrollado por el programa de Voluntarios de las Naciones Unidas (VNU) para la integración del voluntariado en los programas y las políticas que contribuyen a la paz y el desarrollo brindan un excelente marco de actuación para posicionar el voluntariado dentro de la Agenda de Desarrollo Pos-2015. Desde VNU, trabajando mano a mano con estructuras formales e informales de voluntariado en el mundo y con socios afines, iremos mejorando la visibilidad de la contribución del voluntariado en la participación cívica. Los voluntarios y las voluntarias, trabajando dentro de diferentes estructuras, crearemos entornos propicios para la acción ciudadana y haremos un especial esfuerzo en integrar y visibilizar el voluntariado en las estrategias locales, nacionales y regionales.

Los voluntarios y las voluntarias nos autoproclamamos vigías de la nueva agenda. ¿Nos ves? Estamos en los comités escolares de madres y padres mejorando la educación y el acceso a esta para todos y todas, en las plazas y las calles liderando el cambio social, detrás de las redes sociales movilizando ciudadanos comprometidos y generando diálogo, detrás de una catástrofe coordinando ayuda, en las zonas rojas saliendo de la violencia y creando ciudades seguras. Hombres y niños acompañando a niñas, adolescentes y mujeres en el camino a la igualdad, cambiando los patrones de consumo y de producciones sostenibles, generando intercambio y compartiendo buenas prácticas Sur-Sur, Sur-Norte y Norte-Sur. No tenemos fronteras ni límites.

Si juntáramos a todos los voluntarios del mundo, únicamente China tendría mayor población adulta trabajadora. El país voluntario sería el país del compromiso, la solidaridad, la esperanza, la dignidad y la felicidad. En nuestro país, la agenda sostenible sería un hecho.

Estamos convencidos de que podemos lograrlo. Hazte voluntario y acompáñanos hasta el 2030 para alcanzar el desarrollo sostenible en el mundo.