¿Gobierna un estadista o un mercader?

En un primer acto de conciencia atiendo un comercial de música jacarandosa que me invita a comer huevos, diz que porque son buenos para mi salud. Me pregunto quién será el buen samaritano que sin conocerme paga esos consejos musicales tan extrañamente recurrentes y que de seguirlos, bien podría morir de un infarto al miocardio.

Luego, la voz del Presidente, tratando de aliviar los efectos del insomnio. Cual padre de familia informa que logró detener el precio de los combustibles, estabilizar los precios de la energía eléctrica y disminuir los precios de la carne y los huevos. “Hay mentiras que vuelan como albatros/ y otras que vibran como colibríes/ embustes enormes como acongaguas/ y otros pequeñísimos como tréboles/ suele mentirse como se respira, como se pestañea o se estornuda”. Benedetti.

¿Cómo? ¿Qué bajó el precio de las gasolinas?. ¿Habrá logrado convencer a los expendedores nacionales de que renuncien a sus ganancias?, o ¿Le fue dado algún ultra poder para frenar la especulación mundial causada por las interrupciones del suministro en el Mar del Norte y Libia? ¿Intervino en la dinámica de la economía china?

¿Estabilizó el precio de la energía eléctrica?. Alegrón de burro. Se usaron fondos de reserva de las distribuidoras Deocsa y Deorsa, a favor de los usuarios. En el caso de Eegsa se decidió mantener un fondo de Q76.8 millones a favor de la empresa que nos será cobrado en los siguientes trimestres.

¿Disminuyó los precios de la carne? El Ministro de Economía, Sergio de la Torre, acaba de afirmar que las autoridades no pueden intervenir para reducir los precios de la carne, solo pueden monitorearla. Lo que evidencia el alza a los precios es la reducción de la demanda nacional y la exportación de ganado a México que lo compra a mejores precios. Éste, como cualquier otro mercado está sujeto a la ley de la oferta y la demanda, así que lo mejor sería que el presidente adopte las medidas de política económica y laboral necesarias para mejorar la capacidad adquisitiva de la población.

¿Disminuyó el precio del huevo? Sí, en Q40 quetzales la caja, pero esto no es sostenible si no atiende el problema de fondo que, además de la ya citada falta de capacidad adquisitiva, tiene que ver con la gripe aviar que desabasteció el mercado mexicano y, el contrabando. Las pérdidas por contrabando se estiman en Q4 millones diarios pues en cada viaje por el Río Suchiate se pueden pasar hasta 50 cajas de 360 huevos. Ello no solo afecta los precios sino que ha llevado a muchos pequeños y medianos productores a la quiebra con la consecuente pérdida de empleos. La baja al precio del huevo está condicionada a solucionar este problema, uno de los tantos talones de Aquiles de este gobierno. Veremos cuándo dura el compás de espera.

Así que gastarse Q121.5 millones en 18 meses de gobierno para financiar fantasías y venderlas como “resultados” es más absurdo que mi necio afán de amargarme el café de la mañana. Pero, más que absurdo es inaudito que se gaste tanto en cuidar su imagen y la de un partido que, como tantos otros, nunca lo fue. ¿Podría la política dar una justificación ética a esta forma de proceder? Seguramente no, pero el mercadeo político, sí. Entonces, ¿Gobierna un estadista o gobierna un mercader?