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Frankenstein en la Casa Blanca

Durante más de 20 años, cuenta Jane Mayer en «Dark Money», un grupo de billonarios ha financiado candidatos, universidades y centros de estudios para minar el debate liberal e instalar una agenda neoconservadora que reduzca los impuestos a los ricos y achique el poder del Gobierno para controlar a las empresas.
Tipo de Nota: 
Opinión

Frankenstein en la Casa Blanca

19 de Julio de 2016
Palabras clave

Unas palabras de precaución antes de que el terror nos gane: tengan muy presente a Donald Trump, pero más a su creador. Trump es el secundario que se robó el show, el orate de ideas despreciables que el Partido Republicano dejó crecer suponiendo que mantendría controlados a los votantes descontentos. Pero los Frankenstein no suelen resultar chicos lindos. Trump, un experimento fallido para sus mismos creadores, arrastró el debate político de las primarias presidenciales de Estados Unidos a una cloaca de oscurantismo, brutalidad y desprecio perfecta para la voracidad maníaca de la TV y Twitter. Ahora va, como otros, por todo.

La Bestia ha puesto al Partido Republicano en una disquisición ardiente en la que él tiene mucho por ganar y el GOP (Grand Old Party) demasiado por perder. Ahora que es candidato republicano, el GOP tiene que decidir la derrota que defina su futuro: va con Trump y se provincializa como un partido de hombres blancos enojados sin voluntad de entender el mundo a través de la razón o, tras la convención, se parte para dar nacimiento a una fuerza oscura a la derecha de todo mientras lo que qu...

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